El uso de inteligencia artificial, robots y medidores de actividad en el lugar de trabajo tiene un impacto negativo en la calidad de vida

Un importante estudio del Instituto para el Futuro del Trabajo de Londres muestra que la exposición a nuevas tecnologías como monitores de actividad, robots y software artificialmente inteligente ha tenido un impacto negativo en la calidad de vida humana. En la investigación participaron más de 6.000 personas y los investigadores se interesaron principalmente por el impacto de cuatro grupos de tecnologías cada vez más populares en la vida humana.

Los autores del estudio descubrieron que cuanto más expuestos están los empleados a tres de estas categorías (software basado en inteligencia artificial y tecnología de aprendizaje automático, dispositivos de monitoreo como rastreadores de actividad y robótica), peores son su salud y su bienestar general. Por otro lado, el uso de tecnologías TIC que están presentes desde hace mucho tiempo, como computadoras portátiles, tabletas y aplicaciones de comunicación en el lugar de trabajo, mostró un impacto más positivo en el bienestar de los participantes de la investigación.

"Descubrimos que con una mayor frecuencia de uso e interacción de las tecnologías TIC, la calidad de vida aumenta, mientras que disminuye con una mayor frecuencia de uso de tecnologías más nuevas en el lugar de trabajo.", escribieron en el informe de la investigación. Aunque los autores no investigaron directamente las causas, señalaron que sus resultados están en línea con los hallazgos de investigaciones anteriores, que demostraron que "Las nuevas tecnologías de este tipo pueden provocar incertidumbre sobre la seguridad laboral, aumentar la carga de trabajo, provocar rutinización y pérdida del sentido del trabajo realizado, así como una pérdida de autonomía y todo ello afecta al bienestar general de los empleados.".

Los economistas de Goldman Sachs estiman que para 2030, 300 millones de puestos de trabajo podrían desaparecer en todo el mundo debido a la automatización. Principalmente debido al rápido desarrollo de la inteligencia artificial generativa, muchos más roles y empleos cambiarán radicalmente, afirman.

dr. Magdalena Soffia, autora principal de la investigación, dice que el problema no es necesariamente la tecnología en sí, sino la forma en que se utiliza. "No queremos argumentar que existe algún tipo de determinismo en la forma en que la tecnología afecta el bienestar humano. Sostenemos que todo depende del contexto: de muchos factores estructurales, de las condiciones ambientales, de cómo se diseña y de cómo se utiliza. Entonces muchas decisiones humanas", dice la Dra. Sofía.

Como aclaración adicional, ofreció la justificación de que los investigadores de este estudio en particular utilizaron el modelo de medición de la calidad de vida EuroQoL EQ-5D-3L, ampliamente aceptado. Esto cubre factores como la movilidad, la salud mental y el nivel de dolor. "Queríamos capturar una visión más multidimensional de lo que está sucediendo en términos de calidad de vida. Por eso utilizamos este modelo, que está aprobado por el sector de la salud pública en el Reino Unido", añadió.

¿Por qué las TIC, un poco más "clásicas", tienen un efecto positivo en la vida humana? Soffia ve uno de los mecanismos potencialmente posibles en este ámbito, que ayuda a facilitar los procesos de trabajo y, en consecuencia, a aumentar el nivel de eficiencia. Esto le da a la gente una sensación de logro.

Todo lo contrario es evidente en el campo de los medidores de actividad y otras tecnologías de seguimiento. Por ejemplo, los sindicatos llevan tiempo alertando sobre los efectos negativos de esta tecnología en la eficiencia de los empleados.

Por ello, respondiendo a este estudio, muchos expertos señalan la importancia de regular el campo de la inteligencia artificial. Porque de lo contrario, podemos llegar a un punto en el que la inteligencia artificial convierta el mundo del trabajo en un mundo opresivo e insalubre.